lunes, 26 de febrero de 2007

Una visión de conjunto


Asumiendo los aportes de Carrillo y analizando críticamente el travestido rol del Estado producto de la implementación de la política liberal, planteamos la necesidad de revisarlo para lograr avanzar hacia decisiones autónomas y recuperar su rol como ordenador y su capacidad de auditoría. Para que el Estado Nacional pueda asumir estas funciones, es necesario avanzar en la centralización y, simultáneamente, en la limitación de estructuras muchas veces hipertrofiadas. Se requiere así mismo la revisión de la situación actual y experiencias de las provincias y de los criterios de Coparticipación y descentralización desde una mirada que contemple la necesaria adecuación a la realidad regional y local en función de optimizar la articulación de los Programas desde su mejor implementación.
La Ley Nacional y Plan de Salud junto con el funcionamiento del Consejo Federal de Salud como órgano rector permitirán contar con lineamientos políticos básicos necesarios.
Es importante medir el impacto de las políticas y la gestión del presupuesto en función de mejor el impacto alcanzado con los recursos actuales y estudiar la pertinencia de su aumento en base al Plan.
Se hace imprescindible articular la atención en los distintos niveles desde el municipal hasta el provincial y nacional, desde el primer nivel hasta la alta complejidad.
A nivel de la política de salud, consideramos clave contar con un Proyecto Nacional –en tanto contemple a todos los habitantes de este suelo- y que sea compartido por todos los estados provinciales. Cada Provincia debe incorporarse a la planificación desde su propia realidad aportando propuestas propias. Tanto la Nación como cada estado provincial deben evaluar el impacto de las iniciativas y recursos aplicados en el marco de las políticas acordadas y generar indicadores pertinentes para generar las redefiniciones oportunas.
El cambio cultural es fundamental para volver a una visión integral de la salud y alcanzar el compromiso de todos los actores.
En cuanto a la accesibilidad que deberá garantizarse para toda la población, se subraya la importancia de rescatar la constitución de Equipos de Salud que se conciben como bases para la puesta en práctica de la política de salud en el contexto del Proyecto Nacional. En particular, la Atención Primaria de la Salud debiera asegurar el piso de atención y las acciones de prevención a través de los Consejos Barriales de Salud, herramienta de trascendental importancia de la Gestión Participativa en Salud. La participación comunitaria y la organización barrial fomentada en acciones masivas de educación sanitaria.
El desarrollo de una política de salud específica para el ámbito rural y el rescate respetuoso de las medicinas populares y de los pueblos originarios será un modo de respetar la diversidad cultural en salud.
La constitución de redes para la planificación y gestión de las políticas sociales garantizan la incorporación de una realidad diversa que se manifiesta en problemas complejos que abarcan cuestiones vinculadas a salud, trabajo, educación, justicia y seguridad. Una mirada integral es urgente para dar respuestas eficientes.
Humanizar la atención en salud implica humanizar las condiciones de trabajo de los trabajadores de la salud. La formación permanente y gratuita desde el Estado favorece el abordaje de temáticas que vinculan el compromiso ético con la salud como derecho social. En este sentido, debe reconocerse la desmoralización y el desgaste de los trabajadores de salud producto de la crisis y las políticas tecnocráticas.
Los formadores –universidades, institutos terciarios, secundarios– debieran rever sus currículas en el marco de un consenso nacional y trabajar con los Colegios Profesionales para analizar la articulación con las políticas nacionales de salud en pos de una creciente iniciativa estatal. Especial atención se prestará a la jerarquización de las Universidades Públicas y la revisión del rol de la CONEAU como herramienta del Estado para la mejora educativa en consonancia con las políticas nacionales.
La formación de cuadros de gestión, capaces de armar planes estratégicos y operacionalizarlos, deberá contemplar la constitución de equipos que garanticen el cambio propuesto.
En la atención, la política pública prioritará optimizar el tiempo de trabajo efectivo, ordenar el trabajo hospitalario y diseñar estrategias viables tomando en cuenta que no basta la generación de normativas sino la generación de consenso y de pactos éticos con los trabajadores de la salud. Actores claves en la construcción de acuerdos son los sindicatos, las asociaciones profesionales y comisiones hospitalarias y los colegios profesionales. En cuanto a cuestiones de la práctica profesional, la incompatibilidad de intereses entre el sector privado y el público será norma para Directores y Jefes de Servicio.
El marco legal propugnará la carrera sanitaria única, las remuneraciones similares en las distintas jurisdicciones y la no precarización de los puestos de trabajo. Así mismo, deberá asegurarse el reconocimiento económico de los promotores de salud.
La vinculación con las corporaciones y el desarrollo de líneas de investigación coherentes con la política establecida. El desarrollo de tecnologías incorporará las de gestión, la de producción de medicamentos y las “duras” con claros criterios de racionalización de gastos.

Planos

Legal
Ley Nacional de Salud
Ley Nacional de Carrera de la Salud

Planificación
Enfoque epidemiológico de gestión
Articulación dentro del Estado
Articulación entre jurisdicciones
Articulación entre niveles de Atención - Redes
Desarrollo tecnológico
Planificación local participativa
Consejos Barriales de Salud

Cultural
Diversidad cultural en salud
Atención humanizada
Salud Mental

Trabajadores
Agentes de derecho
Sujetos de derecho
Planificación de la formación de trabajadores de la salud
Promotores de salud

Espacios de atención
Accesibilidad
Hospitales
Centros de salud
Diversificación de dispositivos en función de los determinantes de la salud
Calidad

Consensos
Universidades Públicas
Colegios Profesionales
Sindicatos
Asociaciones profesionales
Comisiones hospitalarias

Financiamiento
Adecuación de gasto
Distribución equitativa
Inversión en investigación y desarrollo

Comisión de Salud GL - octubre 2006

No hay comentarios: